La Federación de Caza es la que más licencias deportivas ha perdido en los últimos cinco años. De las 66 evaluadas por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, la actividad cinegética cuenta con 67.000 licencias menos que en 2010, llegando a las 333.000 el año pasado, según el último Anuario de Estadísticas Deportivas. Las causas varían entre los federados y los animalistas, pero hay un factor en el que todos coinciden: la población cazadora envejece y se debilita el relevo generacional: