La caza científica para conocer mejor a las especies
27 julio 2020
Estructura del anillamiento en España. Antecedentes.
Fue en 1930 cuando se colocaron las primeras anillas en España y hasta la guerra civil se habían anillado unas cuatrocientas aves, principalmente cigüeñas. En 1943 el primer presidente de la Federación Española de Caza (FEC), Joaquín España Cantos, organizó la “Oficina para la Investigación y Estudio de la Emigración de las Aves” que fue la primera oficina de anillamiento española. La Ley de Caza de España 1/1970, de 4 de abril, y su reglamento (Decreto 506/1971) establece en el artículo 31 la constitución de la “Junta Nacional de Anillamiento de Aves” de la que la FEC es un miembro legítimo de ella como vocal. Esa Junta Nacional reglamentaria no se creó hasta 1982 y en los dos años siguientes se organizó dentro de ella la “Oficina de Anillamiento” y se repartieron los cometidos de esa oficina, firmando la SEO el primer contrato para hacer el estudio de recuperaciones de anillas. Desconozco por qué razón la FEC, legitimada por la ley de caza de 1970, no fue convocada por el ICONA en 1991, cuando lo fueron todas las demás entidades interesadas y las comunidades autónomas para acordar las normas de anillamiento en España. (1)
Actualmente están como únicas entidades avaladoras, ante la Oficina de Anillamiento: la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife), la Sociedad de Ciencias Aranzadi (Aranzadi), el Grupo Ornitológico Balear (GOB), el Instituto Ornitológico Catalán (ICO) y la Estación Biológica de Doñana (EBD). El anillamiento está organizado en Europa por la “Unión Europea para el Anillamiento de Aves” (EURING), que se fundó en 1963 para estandarizar el anillamiento en el ámbito europeo.
Caza científica. Caza en vivo para anillamiento e investigación.
La caza científica es una modalidad que permite la captura de aves y mamíferos, así como la investigación y bservación de nidos, pollos, madrigueras, colonias y criaderos de especies cinegéticas o protegidas.
La explotación y toma de los datos biométricos de un ave viva ha permitido explicar muchos comportamientos de las migraciones para su análisis y mejor gestión cinegética.
Esta modalidad de caza es una herramienta de la ciencia para hacer diferentes actuaciones sobre un ave capturada viva, al objeto de investigar la biología de esa especie, su dinámica poblacional, el censo de un territorio, las rutas migratorias del ave, así como otros datos que permita conocer todos sus movimientos y las mejores maneras para que su aprovechamiento sea sostenible, cuando se trate de una pieza de caza. Su práctica requiere disponer de autorización de la administración competente, que la otorga a título personal, con una serie de condicionantes para el peticionario.
Dentro de esa definición de caza científica ha tenido especial interés para la Real Federación Española de Caza, la referida a la caza de diferentes aves para su investigación y anillamiento, que ha sido el objetivo de varios proyectos de (FEDENCA)-RFEC, que se establecieron con otras organizaciones interesadas también en la conservación y estudio de especies cinegéticas. La captura de aves se aprovecha para anillarlas o acoplarlas un radio-emisor y tomar una serie de datos que son únicos de esa especie capturada y de ese momento. Es, por tanto, una herramienta científica y de gestión medioambiental. Así se vienen anillando con diferentes procedimientos de captura varias especies, que en el caso de FEDENCA se realizaron con proyectos coordinados con otras entidades de la estructura federativa, de clubs de cazadores especializados en alguna
especie de caza o de otras también de carácter conservacionista. En el ámbito de la RFEC, las aves más investigadas a través de la caza científica han sido tres migratorias: Codorniz común (Coturnix, coturnix) y Becada (Scolopax rusticola) y Tórtola Común (Streptopelia turtur).
También se han manejado otras aves no cinegéticas que se capturan en campo por los especialistas del Silvestrismo, asociados dentro de las federaciones autonómicas. Los ‘silvestristas’ se interesan por la captura de aves fringílidas: Jilguero (Carduelis carduelis), Pardillo (Carduelis cannabina), Verderón (Carduelis chloris), Verdecillo (Serinus serinus), y Pinzón común (Fringilla coelebs) y sus mixtos con la intención de anillar, de reproducir en jaula y de promover la educación al canto para participar en fases competitivas del Campeonato de España de Silvestrismo. (2)
Caza sostenible.
Es un concepto cuyo fin es la conservación de las especies como recursos naturales renovables y con el que estamos sensibilizados muchos cazadores. La caza debe ajustarse siempre a los requerimientos de la conservación.
Hay corrientes de cazadores que entienden la caza como una extracción proporcionada y cabal de cualquier especie para que se mantenga y sea sostenible la actividad, situación que en las condiciones actuales no se da en la caza de la codorniz que muestra en los últimos ocho años un declive acusado que los datos señalan por encima del 30% de la población que nos visita y aprovechamos. Piden tomar medidas y proponen modelos de caza menos agresivos con la codorniz, como sería un cupo adecuado a las posibilidades de caza en cada territorio y en los lugares de concentración, que son donde más incide la caza sobre las poblaciones, rebajar las capturas en cupo y periodo porque son los lugares donde se conseguirá frenar el declive con menor esfuerzo. Por Andalucía entran y regresan casi todas las codornices de España; el cupo andaluz es de 10 codornices y el calendario de caza de 12 días, la extracción posible por cazador es mucho menor que en otras comunidades.
Fuente. cienciaycaza.org