Tras un comienzo de agosto intenso de pesca en los Pirineos, ya va siendo hora de colgar la caña. En general ha sido una temporada buena, con unas grandes jornadas de pesca, algún bolo que otro, visitas a sitios cautivadores y jornadas compartidas con buenos amigos.

Empezamos la jornada a las siete y media de la mañana, Togo (el futuro rey de la codorniz y de la perdiz) y yo. Era la primera vez que salía el perro de caza, así que nada más soltarle empezó a correr como un loco y continuó así veinte minutos más, luego se tranquilizó y empezó a “cazar” sin obtener su fruto hasta las nueve y media de la mañana, cuando vimos y abatimos la primera codorniz que quedó alicorta y el perro la sujetó hasta que la recogí. Dos horas y media más tarde el...

Una vez más, con el calentón previo a la media veda, fiándonos de una oferta de unos viejos conocidos, nos inmiscuimos entre fieles religiosos en las inmediaciones de Madrid, en medio de la visita papal. La tirada prometía, así que nos reunimos con varios amigos, que además son clientes, y dormimos en un hotel apenas a tres kilómetros del cazadero. Nada más llegar al hotel, el calentón iba cogiendo temperatura y es que el pase de palomas era espectacular,  además de que docenas de conejos de monte campaban a sus anchas por los jardines del mismo.

Seguro que alguna vez ha escuchado esta afirmación de forma tajante a muchos "expertos" cazadores, es más, puede ser que usted mismo se lo crea y la defienda en todos los corrillos de caza. Entiendo que aquel primer cazador que soltó esta perla, la cual se ha convertido en la bandera de todos aquellos que critican la caza sobre perdiz repoblada, y la cual les aclaro  por adelantado que defiendo, tenía en mente dos razones para berrear al viento semejante afirmación.

Con el fin de intercambiar ideas, experiencias y realizar la práctica real de la Caza con Arco, diversos representantes de las federaciones vascas, españolas y francesas de tiro con arco se reunieron en Las Landas (Francia). El Delegado de Caza con Arco de la Federación de Euskadi, Jon Olabarrieta, explica, a través de una carta y diversas imágenes, la satisfactoria experiencia vivida esos días.

Después del almuerzo, sentados en el bosque nos decidimos a seguir buscando pájaros de bosque. Al mismo tiempo que empezamos el regreso hacia el coche de Björn. Nos paramos en la orilla de un área talada donde hay algunos abedules y donde pueden estar sentados algunos gallos lira, pero no vemos ni pluma. Empieza a ser tarde y nos decidimos a cruzar el área.

En el periódico digital Desveda.info, todo aquel que desee compartir una buena historia de caza, pesca o tiro deportivo, tiene la oportunidad de poder hacerlo. En esta ocasión el jovencísimo Jon Ortiz de Lejarazu, hermano de nuestro compañero Iker, y toda una promesa del tiro deportivo, ha querido narrarnos sus primeras experiencias de caza. "La temporada comenzó, cómo no, con ilusión, ya que sería mi segunda temporada de caza junto a mi padre y mi hermano. En las primeras salidas de caza conseguimos abatir varios conejos, ya que son la pieza principal para la que tenemos los perros y a la que...

Después del desayuno y después de haber preparado nuestro equipaje, nos vamos en coche al lugar donde Björn varias veces ha visto urogallos y gallo liras. Cuando salimos del coche y empezamos a preparar los esquís, notamos que la consistencia de la nieve está un poco demasiado polvorosa. Aunque llevamos esquíes, nos hundimos más de lo deseable.  Además no es difícil excavar en la nieve y llegar al césped. Malo. Tenemos que tener verdadera suerte para ver algún pájaro porque mientras puedan encontrar alimentos en el césped lo eligen antes de sentarse y comer de los árboles. Pero nos da igual.

Con la construcción en 1968 de la presa de Assuan, 500Km del río Nilo fueron embalsados para crear uno de los pantanos más grandes del mundo, y con ello un hábitat ideal para el desarrollo de la PERCA DEL NILO. Desde Assuan, al sur de Egipto, hasta bien entrado en territorio Sudanes, se extiende el lago Nasser. Una inmensa masa acuática de aguas cristalinas repleta de vida. En ella conviven los míticos cocodrilos, con enormes varanos, y por supuesto con varias especies piscícolas de interés deportivo de primer orden: El vundú, el pez tigre, y sobre todo, la perca del Nilo.